El creador de Sherlock estrena Bookish, donde el detective es un librero que cita a los clásicos

Mark Gatiss vuelve con Bookish
Después de cautivar al público con Sherlock y alimentar la pasión por el misterio, Mark Gatiss regresa con Bookish, una serie en la que interpreta a Gabriel Book, un librero en el Londres de posguerra (1946) que resuelve crímenes gracias a su vasto conocimiento literario.
¿Qué la hace diferente?
Detective intelectual con aroma a biblioteca
Book no tiene poderes especiales: su arma secreta es la literatura. Usa referencias que van desde Shakespeare hasta novelas pulp para entender la psicología y motivaciones de los sospechosos.
Cada investigación se construye a partir de una cita o analogía literaria, y su librería funciona como metáfora de su propia mente.
Tensión emocional bajo apariencia “acosable”
Aunque Gatiss evita definirla como cosy crime, Bookish mezcla melancolía, humor ácido y elegancia visual.
Gabriel mantiene un “lavender marriage” (matrimonio de conveniencia) con Trottie (interpretada por Polly Walker) para ocultar su homosexualidad en una época donde era ilegal.
Esa dualidad añade un trasfondo dramático que contrasta con el tono aparentemente ligero de la serie.
Historia, estética y misterio de época
Ambientada en la Londres de posguerra, la trama explora traumas sociales, la reinserción de excombatientes y los profundos cambios de la sociedad.
Su estética definida como “colour noir” combina sombras intensas, paletas cromáticas ricas y ambientes nostálgicos, sin perder frescura ni estilo.
Extras que suman
Bookish nació como una novela que Gatiss ideó hace ocho años. Durante el confinamiento la transformó en guion, y fue rápidamente comisionada.
La serie se compone de seis episodios, organizados en tres historias de dos partes cada una, lo que permite desarrollar tanto los casos como la evolución de los personajes.
Fue renovada para una segunda temporada antes de su estreno, reflejo del fuerte respaldo que tiene detrás.
En resumen
Bookish es una vuelta de tuerca al género detectivesco: un detective que construye su “palacio mental” con páginas y referencias literarias, en un entorno histórico cargado de ambigüedad emocional.
Gatiss regresa no solo como creador, sino como motor central de un relato elegante, desafiante y lleno de matices, que promete conquistar tanto a amantes del misterio como de la narrativa intelectual.