🇧🇴🇦🇷 Frontera Caliente: Tensión Comercial en Aguas Blancas por Presuntas Represalias Arbitrarias de Bermejo contra Comerciantes Salteños

AGUAS BLANCAS, SALTA, 5 de Diciembre de 2025 – La vitalidad económica de la frontera entre Aguas Blancas (Argentina) y Bermejo (Bolivia), un pulso constante de intercambio informal y legal que sostiene a miles de familias en el Norte Grande, ha vuelto a tensarse. Un grupo representativo de comerciantes argentinos ha encendido las alarmas, denunciando una serie de restricciones arbitrarias y represalias comerciales que, aseguran, están siendo impuestas unilateralmente desde el lado boliviano.

La situación es de extrema preocupación, ya que estas medidas, que se manifiestan como una especie de "bloqueo silencioso", amenazan con paralizar la actividad de la zona primaria y colapsar la ya frágil economía de la localidad salteña.

Los comerciantes, buscando una solución diplomática y rápida antes de que la tensión escale a un conflicto abierto, han presentado una nota formal dirigida al alcalde de Bermejo, Irineo Flores. En la misiva, solicitan una reunión urgente para abordar las restricciones que consideran "arbitrarias y perjudiciales" y que, según su entendimiento, tienen un claro carácter retaliatorio en respuesta a medidas o fiscalizaciones realizadas por las autoridades argentinas.

La relación comercial en esta frontera se basa históricamente en una reciprocidad tácita que permite un flujo de mercancías y personas más allá de las rigideces aduaneras, sustentando el comercio minorista en Bermejo y la venta de productos argentinos a bajo costo. Las denuncias de los comerciantes salteños apuntan a que esta reciprocidad se ha roto de forma abrupta.

 1 Aumento de Controles y Demoras Selectivas: Los comerciantes argentinos denuncian que las autoridades bolivianas han intensificado de manera exagerada los controles a las personas que cruzan desde Aguas Blancas con mercancía, generando demoras intencionales que superan las horas y, a menudo, provocan la pérdida de la jornada de venta.

 2 Restricción de Cantidades y Productos: Se señala una aplicación selectiva de normativas que prohíbe o restringe la cantidad de ciertos productos que pueden ingresar al lado boliviano, impactando directamente en el volumen de negocio de los comerciantes minoristas salteños.

 3 Ambiente Hostil y Reclamaciones: El clima de trabajo se ha vuelto hostil, con presiones y constantes reclamaciones a los comerciantes argentinos, en contraste con un trato más laxo a otros flujos de mercancía.

Los comerciantes argentinos creen que estas acciones son una respuesta directa a medidas de fiscalización que la Gendarmería Nacional o la Aduana Argentina pudieron haber aplicado días o semanas antes para frenar el contrabando o el bagayeo a gran escala desde Bolivia hacia Salta. La lógica de la frontera opera a menudo bajo una ley de retaliación, donde la presión de un lado provoca inmediatamente una contramedida en el otro.

El gremio de comerciantes de Aguas Blancas decidió canalizar su reclamo a través de la vía diplomática local, elevando una nota al alcalde de Bermejo, Irineo Flores, reconociendo la figura del intendente como la autoridad más accesible para destrabar el conflicto.

La carta, redactada en un tono de máxima preocupación pero respetuoso, subraya:

 • El Impacto Económico: Se detalla el grave perjuicio económico que las medidas bolivianas están causando a las familias que viven exclusivamente del comercio fronterizo, subrayando la interdependencia de ambas localidades.

 • La Necesidad de Consenso: Se apela a la historia de colaboración entre Aguas Blancas y Bermejo, pidiendo al alcalde Flores que intervenga para restablecer el consenso y la fluidez del intercambio.

 • Disposición al Diálogo: Los comerciantes argentinos se muestran abiertos a discutir cualquier normativa o preocupación boliviana, siempre que las restricciones sean levantadas inmediatamente.

La misiva es un intento de evitar que el conflicto pase a manos de las cancillerías nacionales, un proceso que suele ser lento y burocrático, y que podría significar la paralización total de la frontera por semanas.

La economía de Aguas Blancas depende casi enteramente de este flujo transfronterizo. Cuando el intercambio se tensa, las consecuencias son inmediatas y graves para Salta.

El mayor temor es que las restricciones escalen a un bloqueo total del paso fronterizo, como ha ocurrido en ocasiones anteriores por motivos gremiales o políticos. Un cierre del puente internacional no solo afecta a los comerciantes, sino a toda la logística regional, el transporte de cargas y el tránsito turístico.

Gran parte del flujo comercial se sostiene en el llamado bagayeo o comercio hormiga, donde individuos cruzan con volúmenes limitados de mercadería para su reventa. Este comercio, aunque informal, es la única fuente de ingreso para miles. Las restricciones selectivas desde Bermejo apuntan directamente a desincentivar y paralizar esta actividad.

Mientras los comerciantes asumen el liderazgo del diálogo, la expectativa recae también en la intervención de las autoridades de Salta.

 • Municipio y Provincia: El intendente de Aguas Blancas y el Gobierno de la Provincia de Salta han sido notificados de la situación y se espera que inicien gestiones informales a través de los canales de la Unidad de Fronteras para apoyar el reclamo de los comerciantes.

 • Presión Diplomática: Si la reunión con el alcalde Flores no arroja resultados positivos en las próximas 48 horas, el conflicto inevitablemente escalará a nivel del Consulado Argentino en Tarija y, eventualmente, a la Cancillería.

La situación en Aguas Blancas es un recordatorio de la delicadeza de las relaciones fronterizas, donde la paz social y la estabilidad económica dependen de un fino equilibrio de intereses entre dos países. Los comerciantes salteños esperan que el alcalde de Bermejo priorice la estabilidad y la convivencia bilateral sobre cualquier medida de represalia.

El desenlace de esta tensión marcará el tono de las relaciones comerciales en el Norte durante las cruciales semanas de fin de año, donde el movimiento de mercancías y personas se intensifica significativamente.