Argentina despide a la abuela de Plaza de Mayo Rosa Roisinblit

A los 106 años, falleció la histórica referente de los derechos humanos que dedicó su vida a la búsqueda de su nieto y de los 140 nietos que ayudó a encontrar.
Argentina ha despedido a Rosa Tarlovsky de Roisinblit, una de las figuras más emblemáticas y queridas del movimiento de derechos humanos. La vicepresidenta y presidenta honoraria de Abuelas de Plaza de Mayo falleció este sábado, a los 106 años, dejando un legado de tenacidad, amor y una incansable búsqueda por la verdad y la justicia.
Una vida dedicada a la búsqueda
Nacida en Moisés Ville, Santa Fe, Rosa Roisinblit era una partera de profesión cuando un hecho de la historia la transformó en activista. En octubre de 1978, la dictadura cívico-militar secuestró a su hija, Patricia Julia Roisinblit, que se encontraba embarazada. Desde ese día, Rosa se sumó a las Abuelas de Plaza de Mayo y dedicó su vida a la búsqueda de su hija y, en especial, de su nieto nacido en cautiverio.
Su lucha incansable de décadas se vio recompensada en el año 2000, cuando logró encontrar y restituir la identidad de su nieto, Guillermo Pérez Roisinblit. Su historia personal se convirtió en un símbolo de la lucha de miles de familias.
Un legado de tenacidad y amor
A lo largo de su extensa trayectoria, Rosa fue mucho más que una Abuela. Se convirtió en una referencia moral para la sociedad, viajando por el mundo para denunciar los crímenes de la dictadura y para visibilizar la lucha por el Derecho a la Identidad. Su activismo pacífico y su firmeza en los reclamos la convirtieron en una figura respetada tanto en Argentina como a nivel internacional.
Su partida marca el fin de una era, ya que con ella se va una de las fundadoras que encarnó el dolor y la esperanza de un país. Su legado de tenacidad y amor se mantendrá vivo en la memoria colectiva.
Resumen
Rosa Roisinblit, presidenta honoraria de Abuelas de Plaza de Mayo, falleció a los 106 años. La noticia fue confirmada por el organismo de derechos humanos. Rosa fue una figura clave en la lucha contra la dictadura y dedicó su vida a la búsqueda de su hija y de su nieto. Su legado se mantendrá vivo en la memoria de los argentinos.